El rico patrimonio mantequero español

Resumen de la Industria de la Mantequilla en España

España es uno de los mayores productores de mantequilla en Europa, con una producción anual de alrededor de 240,000 toneladas métricas. El país tiene una larga tradición en la producción de mantequilla, con algunas de las primeras referencias registradas de esta actividad que datan del siglo IX.

La producción de mantequilla en España generalmente comienza con el ordeño de vacas, cabras o ovejas. La leche se recoge y transporta a una lechería, donde se pasteuriza y se bate para separar la grasa de la mantequilla del suero. Luego, la grasa de la mantequilla se recolecta y se moldea en bloques o rollos, y a menudo se envejece durante unos días o semanas para desarrollar su sabor.

España es conocida por producir mantequilla de alta calidad, y la mantequilla del país se considera entre las mejores del mundo. Esto se debe en parte al clima favorable y las condiciones de pastoreo en España, que permiten la producción de leche de alta calidad.

Características de la Mantequilla Española

En España se producen varios tipos de mantequilla, incluyendo la mantequilla de crema dulce, que se elabora con crema pasteurizada y tiene un sabor suave y cremoso; la mantequilla salada, que se elabora a partir de crema dulce y tiene un sabor salado; y la mantequilla cultivada, que se hace con crema fermentada y tiene un sabor ácido ligeramente agrio.

Además de su uso en la cocina y la repostería, la mantequilla es también un ingrediente importante en muchos platos tradicionales españoles, como los croissants, pasteles y panes. También se usa como untable en pan y tostadas, y como cobertura para vegetales y otros platos.

La producción de mantequilla es una parte integral del patrimonio culinario y cultural de España, y la mantequilla de alta calidad del país es disfrutada por personas de todo el mundo.

Región de Asturias: Un Centro de Producción de Mantequilla

La región de Asturias, ubicada en el norte de España, es conocida por sus productos lácteos de alta calidad, incluyendo la mantequilla. El clima favorable y las condiciones de pastoreo de la región, así como los métodos tradicionales utilizados por los agricultores locales, contribuyen a la producción de una leche excepcional, que se utiliza para elaborar una amplia variedad de productos lácteos, incluyendo queso, yogur y, por supuesto, mantequilla.

La producción de mantequilla en la región de Asturias sigue un proceso similar al de otras partes de España. La leche se recoge y transporta a una lechería, donde se pasteuriza y se bate para separar la grasa de la mantequilla del suero. Luego, la grasa de la mantequilla se recolecta y se moldea en bloques o rollos, y a menudo se envejece durante unos días o semanas para desarrollar su sabor.

Una de las características únicas de la mantequilla asturiana es su sabor. Los pastos de la región son ricos en hierbas y gramíneas, lo que le da a la leche y, a su vez, a la mantequilla un sabor distintivo y delicioso. La mantequilla asturiana también es conocida por su alto contenido de grasa, lo que le da una textura cremosa y rica.

Además de su uso en la cocina y la repostería, la mantequilla asturiana es también un ingrediente importante en muchos platos tradicionales de la región, como la fabada asturiana, un abundante guiso de alubias y chorizo, y la torta de Santiago, un pastel con sabor a almendra. También se usa como untable en pan y tostadas, y como cobertura para vegetales y otros platos.

 

¡Una Receta usando Mantequilla!

Pastel de Limón y Mantequilla
Ingredientes:

• 200g de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
• 225g de azúcar granulada
• 4 huevos grandes
• ralladura de 2 limones
• jugo de 1 limón
• 225g de harina de trigo
• 2 cucharaditas de polvo de hornear
• 1/4 de cucharadita de sal
• 120ml de leche
• Azúcar en polvo, para espolvorear (opcional)

Instrucciones:

1. Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa y enharina un molde redondo de 20 cm.
2. En un tazón grande, bate la mantequilla y el azúcar juntos hasta que estén ligeros y esponjosos. Agrega los huevos uno a la vez, mezclando bien después de cada adición. Añade la ralladura y el jugo de limón.
3. En otro tazón, tamiza la harina, el polvo de hornear y la sal. Agrega gradualmente la mezcla de harina a la mezcla de mantequilla, alternando con la leche, y mezcla hasta que se combine.
4. Vierte la mezcla en el molde preparado y alisa la superficie.
5. Hornea el pastel durante 35-40 minutos o hasta que un palillo insertado en el centro salga limpio.
6. Saca el pastel del horno y deja que se enfríe durante 10 minutos antes de desmoldarlo. Colócalo en una rejilla para que se enfríe completamente.
7. Una vez enfriado, espolvorea la parte superior con azúcar en polvo, si lo deseas.
8. Disfruta de este delicioso pastel de limón y mantequilla con una taza de té o café.